Búsqueda personalizada

domingo, 2 de diciembre de 2007

2 diciembre 2007





“El señor es mi pastor, nada me falta.

Aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tú vas conmigo.

El señor es mi pastor, nada me falta: en verdes praderas me hace recostar; me conduce hacia fuentes tranquilas y repara mis fuerzas.

Me guía por el sendero justo, por el honor de su nombre. Aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tú vas conmigo: tu vara y tu cayado me sosiegan.

Preparas una mesa ante mí enfrente de mis enemigos; me unges la cabeza con perfume, y mi copa rebosa.

Tu bondad y tu misericordia me acompañan todos los días de mi vida, y habitaré en la casa del Señor por años sin término.

El señor es mi pastor, nada me falta.”

(Sal 22)

Seguir leyendo...
     vida
Subir Bajar